Línea del tiempo de la lámpara incandescente.

Siglo XIX

• 1802: Sir Humphry Davy descubre la incandescencia eléctrica.
• 1840: Warren de la Rue crea la primera lámpara incandescente utilizando un filamento de platino.
• 1878: Joseph Swan inventa una lámpara incandescente utilizando un filamento de papel carbonizado.

Siglo XX

• 1904: Hiram Maxim inventa una lámpara incandescente con un filamento de tungsteno.
• 1910: William David Coolidge inventa la lámpara incandescente de tungsteno con filamento de wolframio.
• 1924: El filamento de tungsteno se vuelve más resistente gracias al proceso de alambre de tungsteno.
• 1959: El filamento de tungsteno se vuelve más eficiente gracias a la introducción de gases inertes dentro de la bombilla.
• 1960: La lámpara halógena es inventada por Elmer Fridrich y Emmett Wiley.
• 1976: La lámpara de vapor de sodio se convierte en una alternativa popular a la lámpara incandescente en la iluminación de exteriores.
• 1980: La lámpara fluorescente compacta es inventada por Edward Hammer.
• 1990: La tecnología LED se vuelve comercialmente disponible como una alternativa a la lámpara incandescente.

Siglo XXI

• 2012: La Unión Europea comienza a prohibir gradualmente la producción de lámparas incandescentes.
• 2014: Los Estados Unidos comienzan a implementar regulaciones para la eficiencia energética de las lámparas, eliminando gradualmente la producción de lámparas incandescentes.
• 2020: La mayoría de los países han eliminado la producción y venta de lámparas incandescentes en favor de alternativas más eficientes y amigables con el medio ambiente.

En conclusión, la lámpara incandescente ha tenido una larga historia de innovación y mejoras tecnológicas a lo largo de los siglos, desde los primeros experimentos de incandescencia eléctrica hasta las alternativas más eficientes y amigables con el medio ambiente disponibles en la actualidad. La línea del tiempo cubre los hitos más importantes en la evolución de la lámpara incandescente, desde la creación de los primeros filamentos hasta las regulaciones modernas que restringen su producción y venta. Aunque la lámpara incandescente ha sido superada en gran medida por alternativas más eficientes y amigables con el medio ambiente, su legado como una de las primeras fuentes de luz eléctrica se mantiene en la historia de la tecnología.